Para curar cualquier enfermedad, antes conviene diagnosticarla perfectamente. Un buen Vademecum se convierte en la herramienta fundamental de todo médico que se enfrenta a la enfermedad y busca una cura.
La lengua sufre también enfermedades e infecciones que no siempre son fáciles de sanar: mayusculitis, xenofonismo, pleonasmosis, inclusivitis, archisilabia, filocomodina… Urge un doctor House que dé con el diagnóstico adecuado para poder aplicar el tratamiento sanador. Afortunadamente, tenemos a ese hombre.
Francisco Muñoz Guerrero, escritor, lingüista, corrector y miembro de la Academia Norteamericana de la Lengua Española (ANLE) ejerce como un House lingüístico, con la misma socarronería e ironía que el popular galeno de la ficción, en ¡Eso no se dice! (Pie de Página, 2019).