Entrevista a Marc J. Mellado por la publicación de «Deseos de otras noches»

«Deseos de otras noches duele». Así empieza la sinopsis del nuevo poemario que publicamos en la colección Maresía. En esta obra, su autor, Marc J. Mellado, lleva al lector a escenarios cotidianos en los que la vida se presenta tal y como es y «nos conduce a la dicha de ser y estar, aquí y ahora, a pesar de las despedidas, lo amargo, la rutina y el sinsentido este que llamamos habitar la Tierra».

Deseos de otras noches es tu tercer poemario publicado. ¿Se acostumbra uno a ver sus poemas aglutinados en un libro?

No mucho. Todavía me sorprendo al verlos impresos. Forman parte de una realidad muy íntima y, aunque disfruto viendo cómo llegan a otras personas, siempre me parecerá como que siguen guardados en una carpeta del portátil, en el cajón de la habitación, dentro de mí, que se quedaron a vivir para siempre en el día en que fueron escritos y, a partir de ahí, se convirtieron en algo más.

Esta obra forma parte de nuestra colección Maresía, pensada para acercar la poesía a todo el mundo, porque pensamos que el mundo necesita más poesía. ¿Cómo descubriste tú la poesía y cómo llegaste a sentirte cómodo en tu estilo?

Siempre he considerado que tengo una necesidad expresiva que debo atender; es decir, si no hubiera sido la poesía, podría haber sido la pintura, la música, etc., pero en la poesía descubrí el canal que más se adecuaba a lo que quiero contar, y eso que llegó a mí, como la mayor parte de las cosas buenas que me ocurren, casi por casualidad, sin buscarla y sin saber lo que representaría para mí en un futuro.

¿Sientes que la poesía te ha salvado en algún momento?

Lamentablemente, no. El arte en sí, o cualquier tipo expresión artística, no ha llegado a salvarme nunca. Creo que lo único que puede salvarnos es el amor y todo lo que vaya de su mano.

Citando el prólogo escrito por Gloria Gil, en el poemario se habla de «cuestiones que preferimos meter bajo la alfombra». ¿A qué te ha costado a ti enfrentarte? ¿A qué cuestión le has dedicado muchos de tus poemas a lo largo de tu vida?

Supongo que el simple hecho de estar vivo y el estar sujeto de cierta forma a la coyuntura histórica que nos ha tocado vivir ya me acarrea suficientes frustraciones y deseos de cambio con los que he tenido que acostumbrarme a lidiar desde pequeñito. A mí me ha costado muchas veces verme envuelto sencillamente por la inercia de mis días, atender todas las obligaciones que tenemos como adultos cuando querría estar aprovechando el tiempo de otra manera. Escribo sobre lo que bulle dentro y esa sensación de opresión constante y los efectos que tiene en mi cuerpo y en mi mente suelen preocuparme desde que tengo uso de razón.

¿Cambiaría nuestra forma de relacionarnos con nosotros mismos y con los demás si abrazáramos mejor aquello que nos incomoda?

Depende de cada uno. Entiendo que puede ser bueno para alguien enfrentarse a sus temores y así vencerlos de forma más fácil, pero también entiendo que haya quien no quiera saber nada de ellos y prefiera centrarse en lo bueno y ponderarlo. A mí me viene bien comprender la fuente de mis miedos para poder sobrellevarlos, pero eso no significa que llegue a vencerlos algún día. Me doy cuenta, a medida que crezco, que el paso del tiempo viene muy bien para todo eso.

¿Qué va a encontrar el lector en Deseos de otras noches?

Deseos de otras noches es un diario en verso que comprende un año exacto de mi vida, concretamente el que me llevó a dejar la ciudad en la que nací y crecí para seguir buscando mi lugar en el mundo lejos de ella y mi establecimiento en donde creo que puedo ser más feliz que antes. Podría decirse que he tenido que alejarme para seguir queriendo. Hay otras cuestiones secundarias que lo rodean, que son prácticamente los mismos temas que he tocado siempre cuando escribo, pero esta vez están contados de una forma más directa y más comprometida, si cabe, conmigo mismo.

¿Por qué la ciudad como trasfondo?

Aunque ahora vivo más lejos de ella, la ciudad siempre ha sido mi escenario, y no creo que nunca pueda desligarme de ella (tampoco quiero). La ciudad es un concepto que nos es muy familiar en la actualidad, diría que es algo que casi todos tenemos en común y, además de humanizarnos, nos une como paisaje común y como lugar de base donde ocurre lo que posteriormente acaba por escribirse.

¿A quién le va a encantar este poemario?

Quien haya leído alguno de mis anteriores poemarios encontrará algo más nuevo y algo de lo de siempre, así que no creo que le defraude. Es un libro hecho con mucha dedicación y que lleva dentro mucho trabajo y sentimiento, por lo que espero que cada persona que lo lea pueda extraer algo que le compense.